Descubre la tranquilidad del interior de Ibiza con una visita al encantador pueblo de Santa Gertrudis, seguido de una experiencia enológica que deleitará tus sentidos.
Calles pintorescas y vinos locales
El recorrido comienza en el tranquilo pueblo de Santa Gertrudis, un rincón pintoresco alejado de la costa. Sus calles peatonales y la iglesia del siglo XVIII, que preside la plaza principal, reflejan la serenidad de la vida rural ibicenca.
Continúa hacia una bodega local, donde descubrirás la tradición vinícola de la isla y disfrutarás de una degustación de vinos únicos a los que se ha infundido el alma de la tierra ibicenca.
Duración: 4 horas
Incluye:
- Guía turístico profesional
- Visita y degustación en bodega
Nivel de intensidad: Intermedio. Perfecto para los amantes del vino y la cultura local